jueves, 17 de septiembre de 2009

Don Bosco


Desde hace algunas semanas estamos jugando un campeonato de fútbol en el Colegio que nos vió crecer a mi y a mis amigos: el Colegio Don Bosco. Todos los años se organiza este torneo exlusivamente para los ex alumnos, utilizando el patio principal (piso de baldosa y de dimensiones generosas) y con un alto nivel de profesionalismo en las vestimentas (todos los equipos con camisetas y referee vestido para la ocasión).
Ayer nos tocaba jugar y pude llegar un rato antes. Aproveché entonces para pasear por esas instalaciones que me vieron crecer, correr, divertirme y soñar. Sentí lo que se siente cuando uno se reencuentra con esos lugares que parecieran guardar un secreto personal.
Secreto que encierra el misterio del paso del tiempo y la ausencia.
De haber estado y ya no estar.
Recorriendo los pasillos me vi en varios rincones junto a mis amigos, formando fila, gritando desaforadamente o pateando una pelota de trapo.
Pensé -con cierta incredulidad- que doce años de mi vida habían quedado allí y me habían marcado para siempre.
Yo soy en gran parte ese Colegio, su gente, sus valores y su identidad.

Empatamos 4 a 4, salimos todos juntos (como hace 15 años atrás) y fuimos al quiosco a tomar algo. Allí nos percatamos, sin gestos ni palabras, que el tiempo había pasado y la realidad nos había impuesto sus crueles condiciones.

Sin embargo, no pareció importarnos, porque estábamos más unidos que nunca.

4 comentarios:

  1. Qué lindo Die!!! Que importante es la infancia para el ser humano, no?
    Sin dudas, nos marca para siempre.

    ResponderEliminar
  2. Qué linda oportunidad de volver y respirar ese aire del pasado, junto a lazos atemporales, con recuerdos y nostalgias dulces...

    Cuando empecé a estudiar el profesorado, soñaba con volver a pertencer a mi escuela, desde otra lugar, pero estar ahí, ser parte de ella, otra vez... Hay añoranzas que parece, nos hacen muy bien, no?

    Muy lindo!
    Saludos! :)

    ResponderEliminar
  3. Diego, me hiciste emocionar!
    Es verdad, cada paso dado en ese patio tiene un pasado enorme y haber vuelto con la excusa del campeonato y vernos a todos juntos realmente mueve esas fibras más intimas.

    ResponderEliminar
  4. Cesar!! Gracias por darte una vuelta y por dejar tu comentario. Me alegra que estas palabras ye hayan llegado.
    Un fuerte abrazo
    Diego

    ResponderEliminar